¡ANTES DE QUE SEA DEMASIADO TARDE!
DEL CIELO A LA TIERRA
¿Queréis, o no queréis poner las cosas en su sitio justo?
¿Queréis, o no queréis que esta Célula Macrocósmica, que llamáis Tierra os de, todavía, alimentos?
El Padre Glorioso ha perdido la Paciencia y no está más dispuesto a tolerar vuestra loca y galopante carrera degenerativa.
¿Queréis perecer a toda costa?
¿Ya no estáis en condición de pensar que la Vida es Sagrada y debe ser respetada con la máxima solicitud?
¿Os dais, o no, cuenta de la perniciosa y dañina perturbación biofísica-psíquica que estáis, día tras día, agigantando?
¿Es posible que no alcancéis a comprender que, de esta forma, la Vida se volverá privada de ser tal, que la muerte será patrona de todo aquello que debería vivir?
¡Si no conseguís, rápidamente, revigorizar las Estructuras Portantes que alimentan vuestro existir, será demasiado tarde!
DEL CIELO A LA TIERRA
Eugenio Siragusa
Nicolosi, 24 de diciembre de 1990